Todos los aspirantes prematuros a Alcalde en Santo Domingo Este por el PRM tienen algo en común: «Hacia afuera No Marcan, No tienen Votos»
Reuniones aquí, reuniones allá, dirigentes aquí, dirigentes allá, atomización de los equipos políticos algunos compuestos por empleados del gobierno o promesas de pertenecer a El, deseosos otros que les llegue una Tarjeta de Comida o un Título de Propiedad acelerado, diversos intereses hacen que las reuniones tengan asistentes.
Las aspiraciones son válidas pero nadie que salió antes garantizo éxito, ni antes ni ahora, el liderazgo no se improvisa ni por salir temprano se conquista
Aspiraciones sin Plan, nada que vender, ni argumentos para convencer, solo deseos personales que la única promesa que esgrimen es que estarán mejor con ellos y tendrán empleos pero no hablan que la Alcaldía posee cupos de sueldos pequeños o medianos y que la ley obliga a no usar las Alcaldías como Agencia.
Uno a uno, los aspirantes prematuros coinciden con su contrincantes en fondos y formas sin haber hecho mediciones pírricas elementales que arrojarian inmediatamente que no hay forma de que lleguen al podium.
Para ganar en Santo Domingo Este hay que enamorar al pueblo del municipio y los que al menos hasta hoy, han salido, carecen de discurso y de dotes, además de conocimientos, para competir en una ciudad tan difícil.
Los del PRM creen que el universo es el PRM y los que son funcionarios creen que sus empleados son suficientes como equipo y lo que puedan prometer desde el puesto en el estado podría lograr algo.
Egos, esperanzas, creencias, aceptadas desde las incongruencias del ser humano que con par de pesos o un cargo creen dominar el mundo, que opinan que dando recetas o donaciones o campañas de fumigación, canastillas y otros trillados métodos de venderse podrán avanzar pero el pueblo ya sabe que los políticos se vuelven dadivosos solo en campaña y cuando los que prometen llegan a un cargo los dejan tirados en la cuneta y pasan a servirse del estado.
Causa pena la ausencia de visión de Ciudad de los aspirantes y uno concluye por qué durante tantos años no lograron crear liderazgos capaces de enamorar al electorado y no es porque no quisieran, es porque el desconocimiento de la ciudad y sus necesidades, unido a los egos desmedidos hace de los aspirantes cuenten no solo con pobre capacidad para aspirar sino para colmos, ausentes en su mayoría de dotes eminentemente políticos.
A medida de cada día pasen la realidad comienza a darles en el pecho, sabrán con cifras porque el partido les dirá que No Son Lideres, que No Marcan, que algunos de ellos no pasarían de 200 votos y los que hoy acuden esperanzados en participar de dádivas verán que el Agosto no llegó porque el Estado no repartirá alegremente para que dirigentes y funcionarios mal usen las ayudas sociales para sus campañas de locura.
El PRM sacó solo 29 mil votos y el Alcalde ganó con más de 120 mil. Los que hoy aspiran ninguno marca fuera del partido ni tienen condiciones y sapiencia para sumar hacia afuera, en un ambiente ciudadano que ya no cree en políticos ni en funditas y cuándo cuesta todo el trabajo del mundo crecer incluso, dentro del partido.
Lo peor, es que los números con que se ganó la alcaldía hace creer a los aspirantes e incluso a algunos cargos electivos que ellos son responsable del puntaje y nada más lejos de esa realidad que, se sabe, por más que se explique, no es comprendida, en la mayoría de los casos porque el bajo nivel de entendimiento elemental de la política y la importancia del llevarse por las estadísticas, se impone.
No hay nada que hacer.
En el 2016 el PRM quedó en un disminuido tercer lugar y en el 2024 creen que porque poseen el poder presidencial y municipal ya todos son líderes y simplemente, hay que dejarlos «ser».
El futuro anuncia que muchos quedarán como recuerdo de sillas ocupadas en reuniones que no sirvieron para nada porque a ningún lado condujeron
@fdo_buitrago